Leer para decir, jugar y ser

Para tener en cuenta al momento de adquirir libros infantiles, María Orozco nos sugiere Editorial Edelvives, de textos fabulosos y encantadoras ilustraciones.

Como todas las semanas María Orozco desde el centro cultural de Iadepp, Ciudad Activa, nos acerca su recomendación en literatura infantil y su visión sobre la importancia de los libros desde temprana edad.

La naturaleza empuja o ¿es la vida la que empuja y arrasa?¿Tiene nombre esa energí genética que impulsa la evolución y nos ha dotado de un pulgar oponible,una posición erguida y un cerebro cada vez más complejo? Estamos, parece, obligados a sobrevivir como especie al menos unos cuántos milenios más, si no ocurre nada extraordinario. Pero sobrevivir no es lo mismo que vivir y vivir no es igual a sentir la vida. Para explorar el sentido y las sutiles fronteras que separan una idea de otra, el ser humano ha desarrollado tres estrategias fundamentales: el lenguaje, el juego y la socialización.

Como bien sabemos, el lenguaje aparece en los primeros años…para complicarlo todo. Durante la infancia las palabras se hilan a la experiencia, la experiencia se teje con los afectos y los afectos no hacen el mínimo caso a lo razonable. Nace, crece y se reproduce el universo simbólico. No es de extrañar, entonces, que el lenguaje sea de los temas dominantes en las obras para las primeras edades. Desde libros de vocabulario hasta reflexiones más profundas, la palabra está ahí como una criatura curiosa, necesaria y caprichosa a la que se debe prestar atención ¿ para aprender? ¿ para ser? ¿ para jugar? En cualquier caso, es una producción interesante de analizar dado que delata una visión del lenguaje en la infancia.

El juego está presente en los primeros meses de vida, sin vida, sin embargo, si tiene un momento estelar es cuando se une al lenguaje. El diálogo entre uno y otro alimentará diversas formas de simbolismo. Se trata de una facultad vital para la construcción de la psique humana ampliamente estudiada por autores como Piaget, Vigotsky y Winnicot. En el juego se sueña, se experimenta, se explora y se elaboran miedos, temores y emociones profundas. Allí rige otro espacio y otro tiempo, donde es posible mutar y expandir los límites del abismo, sin caer en él. También , se juega para ensayar quién ser y, más aún, quién ser en relación al contexto y los demás. No es sorprendente, por lo tanto,  encontrar libros que acompañan el crecimiento a través de una dimensión lúdica, más allá de la acción de sus personajes. Corresponderá in con ojo avizor para detectar cuáles son. ¿ Han sido captadas por las pequeñas criaturas? ¿Las han ignorado y han encontrado otras que han hecho propias ? Sin duda , se trata de un tema que da mucho juego.

Parece que está todo listo para la gran aventura: tenemos el lenguaje para decir y pensar, el juego para ensayar y elaborar. Sin embargo, esto no basta para afrontar el terrible sentimiento de impotencia, terror y soledad si nos supiéramos únicos en el mundo. Necesitamos al otro con su mirada y sus diferencias, pues la inmensidad de infinito nos hace vulnerables. Pero si algo hemos aprendido es que el vínculo entre ser y estar nunca fue fácil. Hay una zona de conflicto entre la intención , el hecho y el deseo inherente a la condición humana, que también conforma el argumento de los libros infantiles.

Leer para decir, jugar y ser. Tres verbos de acción destinados a la búsqueda del sentidos y a la lucha por el significado. O, en otras palabras, a dar forma a un vacío que se llena con la inherente ausencia, siempre en permanente evolución.

 

Nuestro recomendado de esta semana es este precioso libro de Editorial Edelvives

Tito domador de Guido van Genechten – Edelvives ( 3 a 6 años )

Tito es la estrella indiscutible del circo Rando. Es un personaje lleno de candor, capaz de sorprenderse por todo lo nuevo que descubre y de ir reconociendo sus sentimientos. Son historias fantásticas y emocionantes sobre los deseos y el valor personal. Hermosas y nítidas ilustraciones despiertan el gusto estético y animan a dialogar con el personaje.

 

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