Florencia, 29 octubre — Todo culpa de Asterix y Obelix: el director de la Galeria de “gli Uffizi” de Florencia admite con entusiasmo su amor por los dos personajes de Goscinny y Uderzo, los dibujantes belgas que exportaron a todo el mundo sus aventuras.
Fuente: Leedor
Eike Schmidt es alemán, de Friburgo, por lo tanto no muy lejos de Francia, de la Galia de Asterix y de su mundo imaginario con el que el director del blasonado museo, de 52 años, se lleva más que bien. Desde su llegada a la galería florentina, impuso con su gestión un verdadero vuelco “pop” en las salas del palacio de los Uffizi construido entre 1530 y 1580 por Giorgio Vasari por encargo de Cosme I de Medici, como oficinas para jueces y magistrados de Florencia.
Sin embargo, partes del palacio sirvieron durante varias décadas para almacenar parte de las extraordinarias colecciones de obras de arte de la familia Medici.
Con la extinción de la dinastía de los Medici, el siglo XVIII, Florencia estuvo a punto de perder sus valiosos tesoros ya que el ducado florentino había pasado a manos del imperio austríaco y la colección habría tenido que ser transferida a Viena. Para evitar que la inestimable colección dejara la ciudad la ultima duquesa de Medici la donó al pueblo florentino, y ya a partir de 1765 el palacio fue abierto al publico como museo.
Una historia rica de intrigas e intereses de una de las familias más emblemáticas del Renacimiento que ahora se cruza con la mirada “pop” de un director alemán que a inicio de su gestión, en el 2015, se hizo fotografiar frente a la “Medusa” de Caravaggio, al que definió de manera irreverente para sus colegas “rock star”.
Con la misma mirada y con el declarado objetivo de quitar el polvo de los siglos a la prestigiosa institución, Schmidt llevó a sus salas y se fotografió con Elton John, Pathi Smith, Ber Harper y otros monstruos sagrados de la música pop.
Su actitud, naturalmente, no siempre cae bien a la parte mas conservadora del mundo del arte, como por ejemplo su decisión de permitir a la “influencer” y empresaria italiana Chiara Ferragni que se retratara con la Primavera de Botticelli a sus espaldas y difundiera la foto por Instagram.
Esta vez, los más sorprendidos son los amantes de las historietas. El acuerdo de colaboración que firmara hoy Schmidt con la reseña de historietas, juegos, video juegos y ciencia ficción mas importante de “Lucca Comics & Game”, que se lleva a cabo anualmente en la ciudad toscana y es segundo por importancia en el mundo después del de Tokio.
El director de Gli Uffizi está convencido de la necesidad de desempolvar las salas del museo y de alimentar “la llama del arte” con iniciativas que lo acerquen al mundo de los jóvenes, ya que en su opinión siempre existió una contaminación entre el arte clásico con los creadores de historietas como Milo Manara y su Caravaggio o la similitud de algunas imágenes del cowboy Tex Willer con frescos de Simone Martini.
En época de pandemia todo esta teñido con la palabra virus y ni siquiera el original director de los Uffizi se salva de dar su receta para un presente mas llevadero y un futuro mejor gracias a esta alianza entre lo antiguo, lo moderno y lo contemporáneo.
Es necesario que las grandes obras de arte dialoguen con el arte popular, sostiene Schmidt ante la inminente llegada a sus salas de mangas, super-héroes y hasta el genero “horror”, ya que, sostiene, las salas de los Uffizi están llenas de monstruos, “seres horripilantes”, como lo demuestra un recorrido por el museo de su iniciativa que se llama “Monstruos” entre estatuas y obras de arte sublimes y al mismo tiempo escalofriantes.
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